La Federación Sindical Mundial, en representación de más de 105 millones de trabajadores de 133 países de los 5 continentes, de cara a la Cumbre de la OTAN de 2022 a celebrarse los días 29 y 30 de junio en Madrid, condena enérgica e inequívocamente la existencia de la OTAN que constituye una máquina de guerra agresiva al servicio de los intereses de los países imperialistas de la alianza.
Denunciamos las mentiras provocativas y las narrativas oficiales de la OTAN de que el objetivo de la alianza es “mantener seguras a sus mil millones de personas”. Los pueblos de todo el mundo saben que la cruenta misión de esta alianza imperialista es mantener y ampliar en lo posible la correlación de fuerzas favorable existente a los países de la OTAN para salvaguardar las ganancias de sus monopolios. En el sistema imperialista que se caracteriza por las interdependencias desiguales que rigen las relaciones entre todos los estados capitalistas, tanto los pueblos de los estados miembros de la OTAN como los pueblos de los demás países no tienen nada que esperar de las alianzas y guerras imperialistas excepto la muerte, el sufrimiento, la pobreza y la miseria.
Denunciamos las exclusiones, discriminaciones, embargos y sanciones impuestas por EE.UU., la OTAN y la UE contra varios países, ya que impactan negativamente en el nivel de vida de las familias de bajos ingresos, trabajadores, pequeños agricultores pobres y estratos populares en general.
Denunciamos la “preocupación” hipócrita de los líderes de los EE.UU., la UE y la OTAN, que invocan descaradamente el Derecho Internacional y la defensa de la libertad cuando hablan de la invasión rusa a Ucrania. Hablan como si la historia humana comenzara en febrero de 2022, falsean la realidad histórica, confirmando que la verdad es siempre una de las primeras víctimas de la guerra. La OTAN invoca la paz, la autodeterminación, la integridad territorial, el derecho internacional, la democracia y los derechos humanos, mientras que son los primeros en hacer guerras matando “lo que sobrevive a su paz”. Son los primeros que intervienen en los asuntos internos de otros estados, cambian fronteras y violan el derecho internacional y los derechos humanos para ampliar sus esferas de influencia y servir a sus planes geoestratégicos.
Los responsables de innumerables invasiones e intervenciones son los principales responsables de la militarización de las relaciones internacionales, ya que insisten en mantener y expandir la OTAN en el contexto de un Nuevo Orden Mundial.
La paz mundial no puede protegerse mediante la militarización o mediante el patrocinio de todo tipo de ideologías nacionalistasde extrema derecha y fascistas. La paz mundial no puede basarse en sanciones y guerras económicas. Quienes, por principio, defienden la paz y la libertad, luchan por la disolución de la OTAN y de todas las coaliciones militares, el desmantelamiento de las armas nucleares, el respeto a la independencia y soberanía de todos los países, y no solo de los que se alinean y sirven a los intereses de los Estados Unidos y sus aliados.
La Federación Sindical Mundial cree firmemente que los gastos militares privan a las personas del derecho fundamental a vivir con dignidad y que la OTAN desestabiliza el mundo por ello la FSM exige la disolución incondicional y urgente de la OTAN. La Federación Sindical Mundial llama a los trabajadores de todo el mundo a luchar contra las guerras imperialistas y el sistema que las genera, a luchar por la paz mundial y la solidaridad entre los pueblos, a oponerse al derroche de recursos y dinero con fines militares, a exigir el desmantelamiento de las armas nucleares y la disolución inmediata de la OTAN.
El Secretariado
http://www.wftucentral.org/comunicado-de-la-fsm-sobre-la-cumbre-de-la-otan-de-2022/?lang=es